Hace aproximadamente un mes
Uber es tema de discusión en el país aunque a nivel mundial ya ha tenido un amplio recorrido. La empresa que surgió en San Francisco en el año 2009 tiene un alto nivel de popularidad y hoy se discute en nuestro país su lanzamiento y funcionamiento en las calles.
Desde el año de su nacimiento, Uber ha sido cuestionada en los diversos países en dónde apareció. Por ejemplo, en Alemania fue prohibida por no estar acorde a las leyes de tránsito y laborales del país en cuestión. Sin embargo, la empresa ha triunfado en países como Estados Unidos donde hoy en la ciudad de Nueva York se registraron más autos en Uber que aquellos taxis amarillos históricos. En América Latina solo en México ha sido ya regulado y la empresa funciona allí de manera legal.
En nuestro país, como en todos, la empresa se ha lanzado al mercado y ha convencido a sus usuarios de que defiendan su permanencia en el país antes de intentar regularizarse. Es la estrategia de Uber desbordar la opinión pública a favor para luego presionar a los gobiernos a mantenerlos, para esto utilizan campañas como "Defendé tu derecho. Defendé Uber" o como los cinco días de viajes gratis en la Ciudad de Buenos Aires.
En la otra vereda, el negocio de los radio taxis e incluso los taxistas independientes visitan los canales de televisión, cortan las calles de la ciudad y ponen el grito en el cielo para la desaparición de Uber, lo cual solo hace que la empresa en cuestión sea cada vez más famosa y más discutida.
Lo cierto es que la aplicación es muy útil para quiénes suelen utilizar servicios de remís o de taxis, ya que tu cuenta está vinculada a la tarjeta de crédito, por lo que no es necesario manejar efectivo, tu familiar o amigo puede seguir tu recorrido y, como
plus, es más barato que cualquier otro transporte similar. Sin embargo, la empresa norteamericana no se encuentra amoldada a las leyes de nuestro país
. En primer lugar, Uber no se hace cargo de los choferes, no tienen ningún tipo de derecho laboral pero tampoco podemos decir que trabajan de manera independiente, ya que es la empresa quién le asigna pasajero. Por otro lado, quién utiliza esto como transporte, tampoco tiene ningún tipo de seguro ante un eventual accidente. Y por último, y no menos importante, Uber no paga impuestos. Al no estar regulado en el marco de la ley de nuestro país, la empresa que ya es multinacional, no aporta un sólo peso al
Estado.
Uber ya logró instalarse en varios países de manera legal después de haber ejercido en ilegalidad y haber estado exento de impuestos durante un tiempo. En M
éxico el paso ya se dio, en Chile y en Argentina se sigue debatiendo. La estrategia de la empresa es inteligente, ya que cuenta con el respaldo de los ciudadanos a la hora de sentarse a negociar con el gobierno. Uber puede llegar a solucionar las complicaciones de varias personas que utilizan transporte público, pero que lo haga en el marco de la ley. Necesitamos que la empresa sea regularizada para funcionar como transporte público y que los trabajadores de la misma cumplan con los derechos laborales que dicta la ley de nuestro país. ¿Uber sí o Uber no?, Uber sí, pero en Argentina, bajo nuestras reglas.